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sábado, 3 de abril de 2010

La conchuda tacha lista

Podría ser obesa mórbida, yonky, alcohólica, apostadora férrea o adicta al sexo, pero ella eligió tachar listas a la hora de hacer andar su espíritu compulsivo. Nada le produce tanto placer como deslizar la lapicera horizontalmente sobre una tarea cumplida. Frente al mundo, pasa por una persona organizada, pero su afán por tachar listas encubre una personalidad híper ansiosa. No son pocas las ocasiones en las que hace cosas de las que luego se arrepiente. Sin embargo, no lo puede evitar. Corre a tontas y a locas, fingiendo aplomo con su cronograma bien armadito y su manía de llegar diez minutos antes a todos lados. Concretar trámites postergados, ordenar el placard y la alacena una y otra vez, pagar facturas mucho antes del vencimiento, afrontar largas colas en el correo, renovar el pasaporte sin necesidad, depilarse antes que el bello asome… todas estas tareas superfluas le dan a la Tacha lista la calma que necesita para no ahogarse en la vorágine de su mente. Sostiene con el reloj y el almanaque una relación compleja, difícil y alternada. Entre el odio y la pasión. A pesar de los ruegos de sus amistades porque lo haga en fecha, no duda en saludar con anticipación para los cumpleaños. En su trabajo, entrega informes con mayor antelación que la necesaria. Cada día se levanta y se acuesta más temprano. Su paradoja es que quiere sacarse permanentemente cosas de encima para ganar tiempo libre y luego no sabe qué hacer con él. Entonces se angustia. Son las cinco de la tarde y quiere que se hagan las ocho, deambula por su casa tratando de hallar algún asunto pendiente que la mantenga en movimiento. Es como un hámster en una rueda, un bicho que no sabe cómo detenerse y se come, toma y juega la vida, en rauda carrera hacia la muerte.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

buenísimo!!

Fascinating dijo...

Es el identikit de una amiga mía

Flavia dijo...

SHIT, una y mil veces!!!!! también soy la conchuda tacha lista! y van....¿ con tantas conchudas me identifico, las reuno a casi todas en mi cabecita y lo hago solita eh!!!????

N y A dijo...

Sí, Flavita, somos un Frankestein de conchudas, tenemos un brazo de una, la cabeza de otra...
Ade